Esta mañana el expresidente del comité cívico, Rómulo Calvo, considera que el fallo contra su persona es una cortina de humo y lo que buscan es tapar el narcotráfico. Voy apelar porque “esta sentencia es injusta”, anunció ante los medios.
La audiencia de sentencia se inició poco después de las 16:00 de ayer, martes. Rómulo Calvo fue acusado por el delito de incitación al racismo y ultraje a símbolos nacionales, esto por el caso denominado ‘Whipala’.
Tras el anuncio de la sentencia, se produjeron incidentes en las afueras del Palacio de Justicia de Santa Cruz. La situación se volvió tensa y la policía respondió lanzando gases lacrimógenos para dispersar a los presentes.
Desde la puerta de su vivienda, el exlíder cívico anuncio que apelará a esta determinación, ya que está en su derecho y justifica estas acciones debido a los “malos fiscales y malos jueces” que llevaron adelante el caso, a quienes calificó de ser serviles a un partido político para amedrentar y perseguir, en referencia al Movimiento Al Socialismo (MAS-IPSP).
Este caso fue activado a denuncia de asambleístas departamentales del Movimiento Al Socialismo (MAS) en Santa Cruz, quienes acusaron a Calvo de decir que la wiphala es un “trapo” que no lo representa, y solicitar que se quite del mástil de la plaza 24 de septiembre durante los actos de la efeméride departamental en 2021.
La Ley 045 contra el racismo y la discriminación, establece en el artículo 281 que “la persona que por cualquier medio difunda ideas basadas en la superioridad o en el odio racial, o que promuevan y/o justifiquen el racismo o toda forma de discriminación o incite a la violencia, o a la persecución, de personas o grupos de personas, fundados en motivos racistas o discriminatorios, será sancionado con la pena privativa de libertad de uno a cinco años”.
Sin embargo, la declaración de Calvo en la que dijo que la bandera era “un trapo que no lo representa”, data del 12 de octubre de 2021, luego de que organizaciones afines al MAS realizaran una marcha por la “reivindicación de la wiphala y la defensa del gobierno de Luis Arce” y no del 24 de septiembre de dicho año.
“hubo un momento en que la justicia me quiso llevar con engaños. Se apostaron en la puerta y quisieron meterme a una camioneta, supuestamente para llevarme a mi casa”. Relato el ex líder cívico.
Comentó que lo consideró “un cuento, no me quise subir, y comenzaron a amedrentar a todas las personas que nos acompañaban. Gasificaron a todos, como lo hicieron en los 36 días de paro”.
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