La ex presentadora Desiree Durán ha alzado la voz contra su exesposo, Rony Suárez, a quien acusa de violencia psicológica y física. Sin embargo, tras más de un año de espera, su denuncia sigue sin avances. Lo que más indigna a la exreina de belleza y a la opinión pública es que Suárez, señalado por sus presuntos vínculos con la red del narcotraficante Sebastián Marset, parece gozar de un manto de impunidad.
“No existe justicia, ¿de qué protección goza?”, cuestionó el analista en seguridad Omar Durán, reflejando el sentimiento de impotencia de quienes ven cómo casos como este se diluyen en el tiempo sin respuestas ni consecuencias.
Suárez fue investigado por legitimación de ganancias ilícitas, acusado de haber recibido dinero de Marset para la creación de empresas fachada. Pero, a pesar de la gravedad de estas acusaciones, el caso nunca avanzó. En agosto de 2023, el ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo, hizo pública la investigación, pero, sorprendentemente, meses después la Fiscalía decidió devolver los bienes incautados a Suárez, generando sospechas y críticas sobre un posible encubrimiento.
El analista Omar Durán cuestionó la inacción de la justicia, señalando al juez Roger Salvatierra y a la fiscal Nilda Ávalos como responsables de una retardación de justicia que debe ser investigada. “Es inconcebible que se devuelvan bienes a alguien acusado de lavar dinero para un narcotraficante. Esto demuestra que hay protección desde las más altas esferas”, sentenció.
Desiree Durán: una lucha silenciada por más de un año
Por el bienestar de sus hijos, Desiree Durán optó por callar durante mucho tiempo. Sin embargo, tras la falta de avances en su caso y los vínculos de su exesposo con el narcotráfico, decidió romper el silencio y exigir justicia. “Esperé pacientemente, pero el sistema sigue sin responder”, manifestó con indignación.
La falta de acciones contra Suárez refuerza las sospechas de que cuenta con protección judicial y fiscal. “Es inexplicable que alguien señalado como parte de una organización criminal no enfrente consecuencias. Hay algo que no cuadra y la justicia debe responder”, advirtió el analista.
La denuncia de Desiree Durán no solo pone en evidencia las dificultades que enfrentan las víctimas de violencia de género para ser escuchadas, sino que también revela un sistema judicial que parece actuar con doble moral cuando los acusados tienen poder e influencias.
Mientras la ex presentadora sigue esperando respuestas, las preguntas sobre la protección de Rony Suárez siguen sin resolverse. ¿Quién lo protege? ¿Por qué la justicia no avanza? ¿Hasta cuándo el sistema seguirá favoreciendo a quienes están vinculados con el crimen organizado?
El silencio de las autoridades es tan preocupante como revelador.
