El ministro de Educación, Edgar Pary, suscribió este viernes un “acta de acuerdo” con la dirigencia de los maestros rurales del país y reveló que ya está trabajando de manera directa con las bases del magisterio urbano, que asumen una serie de medidas de presión desde el pasado 6 de marzo en demanda de mayor presupuesto, ítems y otros pedidos.
Pary dijo que ambos sectores tienen similares demandas y que el Ministerio de Educación continuará trabajando, por ejemplo, en el tema de los ítems de nueva creación.
“Vamos a seguir trabajando y asignando ítems conforme a los alcances presupuestarios que tenemos; ambos sectores necesitan ítems y a ambos sectores tenemos que seguir atendiendo, particularmente, en unidades educativas donde están pagando padres y madres de familia, que es en el eje troncal”, afirmó.
Según la autoridad, “el crecimiento vegetativo fue cubierto prácticamente en siete departamentos”, aunque luego reconoció que “obviamente puede haber algunas excepciones”.
Sin embargo, “con el magisterio urbano estamos trabajando en este momento, no con ellos (los de la dirigencia), sino de manera directa con las bases, donde estamos nivelando (el déficit histórico) de química y física, ya hemos trabajado con Chuquisaca, Pando, Beni y Tarija en una primera fase”, añadió.
Adelantó que, en el transcurso de la próxima semana, se trabajará del mismo modo en Oruro, Potosí, La Paz, Cochabamba y Santa Cruz.
“Para todos hemos asumido el compromiso de nivelar (el déficit histórico) de química y física al 100% hasta septiembre y (esta propuesta) es la otra oferta que habíamos hecho a nuestros colegas (dirigentes) del magisterio urbano, pero obviamente aquí no se trata de firmar (acuerdos), sino de atender”, puntualizó.
Recordemos que, las dirigencias de los maestros urbanos decidieron continuar con sus medidas de presión.
Para este viernes los maestros urbanos tienen previsto nuevas marchas y desde la próxima semana se concentrarán otra vez en La Paz para masificar sus protestas con nuevas delegaciones de distintas regiones del país.
Incluso, sigue latente la amenaza de ir a un posible paro de 72 horas.
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