Una reunión habitual del expresidente Evo Morales con sus seguidores terminó en un tenso intercambio verbal con una delegación de Warnes. El encuentro, que inicialmente parecía un diálogo con comerciantes por cuenta propia, dio un giro inesperado cuando Morales puso en duda la lealtad política de los visitantes.
“¿Son espías o son seguridad?”, lanzó Morales al grupo, que respondió con sonrisas incómodas. Momentos después, el exmandatario volvió a increparlos: “En este momento ya tenemos un traidor en su pueblo”, señaló, dirigiéndose a uno de los asistentes.
El señalado, Dionisio Auca, se identificó, lo que llevó a Morales a acusarlo de pertenecer al ala política de Mario Cronenbold. “Dionisio Auca es dirigente del MAS-IPSP. Ahora puedo entender, ustedes son del grupo traidor de Cronenbold, ustedes son arcistas”, afirmó.
El comentario generó murmullos entre los asistentes, mientras Morales insistía en su acusación. “Él ha caído por su propia boca, felizmente está grabado, no somos tan tontos”, dijo antes de cortar la conversación cuando intentaron responderle.
A pesar del momento ríspido, la reunión continuó por otros 50 minutos, aunque Morales ya no volvió a referirse al grupo de Warnes.