Evo Morales se encuentra protegido por un dispositivo de “seguridad de élite” en el Trópico de Cochabamba, mientras la tensión crece ante su posible aprehensión. Vicente Choque, secretario político de las Seis Federaciones del Trópico, lanzó una advertencia alarmante: “Si intentan apresarlo, correrá sangre”.
Choque dejó claro que cualquier intento de captura de Morales no será sencillo y que el gobierno se enfrentará a una feroz resistencia. “Tenemos vigilias y protección, y si se atreven, será costoso”, afirmó en una entrevista con Erbol.
El exmandatario, quien enfrenta acusaciones de trata de personas por una relación con una menor durante su gobierno, se mantiene en el trópico desde hace semanas. Choque, en un tono desafiante, advirtió que la Policía probablemente recurriría a la violencia armada para intentar aprehenderlo, lo que podría generar enfrentamientos con los cocaleros que resguardan a Morales. “La represión será con armas de fuego, y si caen compañeros, no lo vamos a tolerar”, añadió.
Además, Choque sostiene que el proceso judicial contra Morales tiene fines políticos, acusando al gobierno de intentar desprestigiar al exlíder. La posibilidad de que las movilizaciones “evistas” se reanuden a principios del próximo año también está sobre la mesa, alimentadas por la crisis económica y el rechazo a los cargos en contra del exmandatario.
Mientras tanto, la Fiscalía ha solicitado una alerta migratoria y está a la espera de que un juez defina la fecha de audiencia cautelar, donde podría dictarse la detención preventiva de Morales. La situación se mantiene en el límite, y la incertidumbre sobre lo que pueda suceder sigue alimentando el clima de tensión en el país.
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