El paro del transporte público en Santa Cruz de la Sierra cumple su segundo día, sin avances en las negociaciones y con el municipio firme en su postura de no aceptar presiones.
Mientras los transportistas insisten en el alza del pasaje y mantienen bloqueos estratégicos en la ciudad, las autoridades municipales advierten con tomar medidas contundentes.Bernardo Montenegro, vocero municipal, dejó claro que la Alcaldía no negociará bajo amenazas.
“No cederemos ante chantajes. Exigimos el respeto a la normativa vigente y el cumplimiento de requisitos básicos antes de siquiera discutir un ajuste tarifario”, afirmó.
El funcionario recordó que los transportistas deben registrarse en Santa Cruz, tributar en la ciudad, instalar cámaras de seguridad en los vehículos, ampliar horarios y habilitar el cobro electrónico antes de plantear cualquier incremento en las tarifas.
Ante la persistencia del paro y el perjuicio a la población, el municipio evalúa abrir licitaciones para que nuevas empresas operen en las rutas de la ciudad. “Si siguen perjudicando a la gente, vamos a licitar los anillos. Queremos transportistas comprometidos con un servicio de calidad”, advirtió Montenegro.
Mientras tanto, miles de ciudadanos enfrentan dificultades para movilizarse, en medio de un conflicto que parece lejos de resolverse y con un escenario cada vez más tenso entre transportistas y autoridades.