El asesinato del capitán José Carlos Aldunate ha sacudido al país y desatado una ola de cuestionamientos hacia diversas instituciones del Estado. Ante esta situación, el presidente Luis Arce instruyó al ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo, y a la Policía Boliviana agilizar las investigaciones para evitar que el caso sea utilizado con fines políticos.
“Es fundamental impedir que actores intenten sacar provecho político de la trágica muerte del capitán Aldunate. Por ello, he solicitado que se aceleren las pesquisas correspondientes”, expresó Arce a través de sus redes sociales. Además, el mandatario expresó sus condolencias a la familia del oficial, asesinado el 19 de febrero en Santa Cruz.
El crimen ocurrió cuando Aldunate salía de su vivienda y fue interceptado por dos sicarios, quienes lo acribillaron con al menos siete disparos. La autopsia confirmó que murió de forma instantánea.
Datos preliminares revelan que los autores del crimen habrían huido en una avioneta desde el aeropuerto de El Trompillo, zona donde operan reparticiones estatales, lo que incrementa la presión sobre las autoridades para esclarecer el hecho.
El viceministro de Régimen Interior y Policía, Jhonny Aguilera, señaló que se descarta un ajuste de cuentas y se maneja la hipótesis de una venganza, lo que añade un nuevo giro a un caso que ha puesto en entredicho la seguridad y el control institucional.
La población y diversos sectores del país esperan resultados rápidos y contundentes en una investigación que promete revelar detalles explosivos en las próximas horas.